La difícil vida del trabajador de la noche

Hoy siento la necesidad de hablar de los trabajadores de la noche, -no de los empresarios-, porque algunos se lo merecen. Podríamos empezar por los porteros. Siempre pensamos que no tienen cerebro y que el traje le aprieta en su brazo, que es como nuestra pierna, porque se lo compran pequeñito para marcar. Creemos que sólo [...]