Cyrano y el Negro conocen la noche de la capital

La luz del sol me cegó el viernes a mediodía a la salida del edificio Sevilla-2. En realidad, era como una llamada del Cielo. Una voz lejana me decía: «Aprovecha esta tarde para no hacer nada y emborráchate con tus amigos». Mi garganta estaba seca después de tanto trabajar; mi corbata me asfixiaba a pesar de [...]